A mediados del mes pasado saltó la noticia a los periódicos: un sismólogo kirguiso avisaba de que el fin de semana del 24-25 de mayo iba a tener lugar en una zona próxima a Almaty un terremoto de una gran magnitud con miles de víctimas.
Hubo de todo, los que no se lo creyeron, los que se lo creyeron a pies juntillas y los que por si acaso, ese fin semana se fueron de campo o al menos no estuvieron en su casa, buscando algún lugar más seguro.
Las reacciones no se hicieron esperar, en primer lugar por parte de la comunidad científica, que acusaban a ese científico de hacer declaraciones que ni los propios japoneses, los grandes expertos en la materia y con medios a distancias astronómicas de los que puede tener cualquier sismólogo kirguiso, pueden prever un seismo con tanta antelación.
Las autoridades kazajas también reaccionaron, descalificando al científico y tratando de tranquilizar a la población. El mejor, como para premio, fue un alto funcionario encargado de la intervención en caso de catástrofe que después de criticar la noticia, afirmó que la población no debía preocuparse pues se habían previsto¡ 300.000 nuevas fosas en los cementerios! No me digáis que no es para darle el premio a este hombre. Pero el premio a la estupidez o a qué se yo.
Vivimos en una ciudad construida en zona de alta actividad sísmica. Todos los días se registran movimientos, casi todos pequeños, aunque hemos notado alguno superior a de tres grados. El efecto de un anuncio como el realizado por ese científico provoca mucho temor porque hace un siglo (1911), se registró un terremoto que destruyó la ciudad de Almaty, y sólo quedo en pie la catedral ortodoxa, construida de madera y sin clavos de unión. A todo esto se une el ya de por sí espíritu fatalista de las poblaciones nómadas que creen en las desgracias como parte de su vida, ante las que sólo la naturaleza decide quien vive y quien muere.
En fin, que no pasó nada y las 300.000 tumbas se quedarán para mejor ocasión.
Hubo de todo, los que no se lo creyeron, los que se lo creyeron a pies juntillas y los que por si acaso, ese fin semana se fueron de campo o al menos no estuvieron en su casa, buscando algún lugar más seguro.
Las reacciones no se hicieron esperar, en primer lugar por parte de la comunidad científica, que acusaban a ese científico de hacer declaraciones que ni los propios japoneses, los grandes expertos en la materia y con medios a distancias astronómicas de los que puede tener cualquier sismólogo kirguiso, pueden prever un seismo con tanta antelación.
Las autoridades kazajas también reaccionaron, descalificando al científico y tratando de tranquilizar a la población. El mejor, como para premio, fue un alto funcionario encargado de la intervención en caso de catástrofe que después de criticar la noticia, afirmó que la población no debía preocuparse pues se habían previsto¡ 300.000 nuevas fosas en los cementerios! No me digáis que no es para darle el premio a este hombre. Pero el premio a la estupidez o a qué se yo.
Vivimos en una ciudad construida en zona de alta actividad sísmica. Todos los días se registran movimientos, casi todos pequeños, aunque hemos notado alguno superior a de tres grados. El efecto de un anuncio como el realizado por ese científico provoca mucho temor porque hace un siglo (1911), se registró un terremoto que destruyó la ciudad de Almaty, y sólo quedo en pie la catedral ortodoxa, construida de madera y sin clavos de unión. A todo esto se une el ya de por sí espíritu fatalista de las poblaciones nómadas que creen en las desgracias como parte de su vida, ante las que sólo la naturaleza decide quien vive y quien muere.
En fin, que no pasó nada y las 300.000 tumbas se quedarán para mejor ocasión.
¿Quien se merece el premio, kazajos o kirguisos?
17 comentarios:
Yo lo daría compartido. Vaya forma de alarmar a la población para luego no pasar nada de nada. un beso.
PAQUI
Yo te confieso que soy muy miedica.
el comentario que hace este alto funcionario sobre las fosas es muy fuerte no?
sois muy valientes.
un besito
HOLA FAMILIA
DECIROS QUE YO YA SENTI EL TERREMOTO DE NAVIDADES, ASI QUE PONER PIES EN POLVOROSA. Y SOBRE TODO ME ACOJONARON DICIENDO QUE SE PREVEIA OTRO PARA ESTAS FECHAS. ESPERO QUE NO HAYA NINGUNO. POR LO MENOS MIENTRAS QUE ESTEIS ALLI LOS ESPAÑOLES.
MUCHOS BESOS. POR CIERTO HOY IGOR HA ECHO YA TRES AÑITOS. ESTA PARA COMERSELO, YA VEREIS CUANDO VENGAIS A ESPAÑA Y TENGAMOS OPORTUNIDAD DE VERNOS.
FERNANDO
Jeje, pues si se lo llevan los dos, ahora me rio pero no me digas que no es para correrlos a gorrazos. Un beso
AGUABELLA
Yo también soy miedica, pero por suerte algunos movimientos que han habido más fuertes, no me han pillado aqui, o estaba en España o de vacaciones. Aqui siempre con la mosca detrás de la oreja porque es zona sismica pero con gente como estas dando noticias, ¿para qué queremos más?, jeje. Un besito
TATI&BORJA
Yo me voy librando de ellos, aunque como se registran diariamente varios pequeñitos, yo creo que en alguna ocasión lo que me ha parecido un camión habrá sido un movimiento, porque toda la gente lo siente menos yo, jeje.
Felicidades al chiquitin y ya mismo espero vernos. Un besito a los tres
Espero Paqui que no suceda,nunca estas desgracias yo tambien soy miedosa y seguro que siento una noticia asi y nose que aria, cuidate que sois muy balientes..
Saludos Cispas
Bueno eso pasa en España, en Japón o en EE.UU.
Premio para todos, y así no hay problemas, que bastantes tenemos ya.
Besos.
Te debo el comentario sobre el post ando a mil x hora, solo paso a decirte que voy rumbo al aeropuerto a encontrarme con el verano màs caliente de amèrica!
Te dejo un abrazote y espero que todo estè marchando super padre para ti!
Querida Paqui, nunca faltan fatalistas!! Menos mal que no pasó nada!! Pero aún así, quien les saca el susto a los que creyeron?Parece que imbéciles...hay en todas partes. Un beso querida Paqui..y espero que nunca, nunca, nunca,les pase nada tan feo!! Un beso muy grande...
¡¡Anda que el tio se quedó agusto!!.
Besos
Acá en Chile de alguna manera estamos acostumbrados a temblores, terremotos y volcanes.....somos un epicentro de todas estas cosas.....pero aun hay idiotas que aterrorizan a la gente...
Saludos,
María José
Es que no entendéis al hombre...
El tío acertó solo que un pelín desviado ya que fue en China...
Pero de que acertó, acertó.
Así que la próxima vez, hazle caso y sal pitando...jajaja
Besos y salud
Yo le daria el premio a los dos uno por alarmista y el otro por fatalista.....pero bueno mejor ser prudente y por si acaso mejor salir pitando que nunca se sabe y si aciertan eh!!!...jeje.
cuidadito por hay..
besos
CUCA
Pues sí, noticias así son para alarmarse, pero conociendo como son aqui de fatalistas, en este caso no le dimos importancia. Un beso
SOMMER
Anotado, premio para todos los ineptos en todo el mundo, jeje. Un beso
ANGIE
Gracias. Que lo pases muy bien y disfruta que te lo mereces. Un besito
ALICIA
Sí, imbéciles hay en todos los sitios, pero con estas cosas no se pueden jugar y alarmar a una población en un lugar que se registran movimientos sismicos diarios. Un besazo
GATA
Ya te digo que se quedaron agusto, por decir tonterias que no quede, jeje. Un besazo
MARIAJOSE
Efectivamente todavía quedan imbéciles que se permiten alarmar una población. Tu que vives también en zona sismica, entederas cuando cuento esto, no es para jugar con estas cosas. Un beso
GENIN
Jeje, sera eso, lo dejaremos así y nos fiaremos para la próxima. Es que no hay por donde cogerlos. Besitos
RAKEL
Te aseguro que acercar, puede que acierten pero no porque lo sepan, si no porque cada día hay movimientos de mayor o menor intensidad. Pero como tu dices, el premio para los dos que no se enfaden que tienen la misma inteligencia, jeje. Besitos
!!Hola Paqui!! cuando puedas pasas por mi blog, te dejé un regalito, besos.
Pues a mí todo eso me da miedo... ¡¡Vamos que tardo en hacer maletas 0,2!!
besotes corazón
La histeria alarmista suele ser bastante mala, igual que la hipocondria. Cuántas veces hay personas que lo pasan mal temiendo tener algo y luego no lo tienen? Ya han sufrido como si lo tuvieran...
En fin, que los anuncios de este tipo de desastres me los tomo con precaución pero nunca con miedo. Los peores son los que no se esperan. Si ocurre un terremoto inesperado puede pillarnos de sorpresa y será peor.
Otro ejemplo son las amenazas terroristas. Cuando se ha esperado algún atentado para eventos o fechas señaladas no ha pasado nada, pero a todos nos cogieron por sorpresa los terribles atentados del 11-M en Madrid (Atocha).
En fin, que nunca hago caso de alarmistas, ni debe alarmarse uno mismo, que es peor.
A ese hombre le deben de dar el premio a la inteligencia y la diplomacia:):)
Menudo susto, el escucharle me refiero:):)
Me alego de que no se cumplieran tan nefastas predicciones.
Besos
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