Este post quiero dedicárselo a las familias adoptantes vascas que conocí en Almaty.
Ahora en mis vacaciones por el País Vasco, hemos quedado con ellas para volver a vernos.
Borja y Olatz, llegaron por Nochebuena, personalmente no nos conocíamos, solamente a través de mi blog. Sé que visitan mi blog muchas familias que tienen su sueño puesto en ser padres en Kazajstán, si de algo les ha podido servir mi blog, me alegro enormemente.



Esta familia, adoptó un pequeño llamado Igor. En el tiempo que pasaron en Almaty tuvieron momentos buenos y malos pero al final todo se recompensa cuando tienen entre sus brazos a su hijo.
Igor es un niño muy espabilado e inquieto, le encanta la música, pudimos comprobarlo cuando con el móvil de su padre, escuchaba y tarareaba las canciones. Ahora al encontrarnos con él, hemos comprobado el cambio que ha dado. Se le nota que es feliz, pero de eso no cabe ninguna duda porque tiene unos padres maravillosos.

Otro día nos encontramos con otra familia que también compartieron con nosotros sus días de adopción en Almaty, pero respeto su decisión y han preferido que no los nombre ni ponga fotos de su hija. Ellos saben que los apreciamos mucho, que hemos compartido muy buenos momentos juntos cuando han estado a 8000km de sus familias. Tienen una niña preciosa, regresaron a los pocos días de venirme yo y cuando la hemos visto, el cambio también ha sido tremendo.

Paula es otra chica que estuvo adoptando hace más tiempo. No hemos podido verles porque no les concreté los días que estaríamos por allí, y cuando estábamos en Irún, ellos estaban en Bilbao disfrutando de las fiestas, al otro día regresábamos y ya era imposible vernos. Hemos quedado para otra ocasión. Paula adoptó un niño, Beñat que está hecho un hombrecito porque ha pasado más tiempo.

Durante mi periodo en Kazajstán, han sido muchas las familias, de varias Comunidades, a las que hemos conocido en ese periodo que la adopción les llevaba a aquel país y con los que hemos establecido unos vínculos muy especiales, tanto que algunos cuando nos hablan de sus niños, hablan de “nuestros sobrinos”. Es muy conmovedor.
Desde aquí, les deseo todo lo mejor en sus nuevas vidas como padres y estoy contenta de haberles conocido y compartido sus aventuras en la adopción.
Ahora que ya tenéis a vuestros hijos, olvidad los malos momentos que os han hecho pasar con tanta burocracia, empezando por España y terminando por Kazajstán.

No hay derecho que a todas estas familias, les pongan tantas trabas en el camino y les saquen tanto dinero por el simple hecho de querer ser padres y que de todo esto se aprovechen y se cree un negocio.

Desde este verano, se ha cerrado por ley las adopciones en Kazajstán para todos los españoles, se dice que por irregularidades en el país (Kazajstán) y por otros motivos. Lo triste es que con estas cosas los más desfavorecidos son los más débiles, es decir los niños que esperan ansiosos tener unos padres, y esos padres que esperan ansiosos tener un hijo.
A la Administración tanto de un país como de otro, les importa poco tanto las familias como los niños, si no fuese así no hubieran generalizado y hubieran adoptado medidas caso por caso o hubieran actuado a más alto nivel.
Felicidades a todos los que su expediente ha entrado en el plazo antes de cerrar y ánimo a los que se han quedado a la espera.