Foto: Cartel de la representación


El último fin de semana de Agosto estuvimos en una localidad de la provincia de Badajoz, en la comarca de La Serena, en la que cada año se representa “El alcalde de Zalamea”, obra de Calderón de la Barca y que ha sido adaptada por Francisco Brines, en una versión mucho más “representable” y que ha sido declarada de Interés Turístico Regional.
La obra se representa en la plaza de este pueblo por la mayoría de los vecinos, incluyendo niños, que dedican muchísimas horas de su tiempo a los ensayos, siendo los de los últimos días hasta altas horas de la madrugada. Las mujeres de la asociación de vecinos cosen todo el vestuario, y estamos hablando de 600 personas, que se dice pronto.Foto: Parte del escenario

El aforo, yo calculo que puede ser de unas dos mil personas y al final son muy pocos los asientos que han quedado libres. El principio de la función es espectacular porque empiezan saliendo casi todos los vecinos que actuaran y de pronto parece que te olvides de la época en la que vives y te traslades varios siglos atrás. Se convierte en un hervidero de gente, vendedoras, frailes, niños jugando, etc. todo lo que podemos imaginar que había en una población de aquella época. A continuación comienza la historia y, en muchos casos, parecen actores profesionales, se notan las horas de ensayo.Foto: Era de trigo

Cuando la obra llega al final, después de casi dos horas, los aplausos no cesan, y la gente se pone de pie para alabar el buen hacer de estos vecinos que, con su esfuerzo, han conseguido que su pueblo se conozca en realidad y que no se crea que sólo existe en la ficción de la obra.
Ahora, después de la declaración de Interés Turístico se ha puesto en marcha la maquinaria de la SGAE,( antes simplemente lo ignoraban) que pretende cobrar unos 14.000 euros por las representaciones de todos estos años. Nosotros pagamos diez euros por adulto y cinco por niño. Si suponemos que hubiera unas dos mil personas y que de esas, unos 500 podían ser niños, me sale (y si me equivoco que alguien me corrija) una recaudación de unos 17.500 euros, que entre 600 personajes me sale a algo menos de treinta euros. Teniendo en cuenta que son tres días de representaciones, una persona que está casi un año ensayando, percibe unos 100 euros totales, menos de un euro diario de trabajo. De esa miserable cantidad de dinero, la SGAE quiere cobrar unos derechos que, como siempre, son más que discutibles, pero ¡ojo con hacer algún comentario! porque esta Sociedad, enseguida te lleva a los tribunales y no seré yo quien les de pie para ello. Sólo os expongo los hechos y ahora vosotros mismos podéis opinar.Foto: Los tercios de Flandes.

En fin, que creo que sería una terrible injusticia, pero en cualquier caso os aconsejo que quién pueda que no se lo pierda.
Hice muchas fotos pero solamente os pongo alguna pero en ninguna que salgan menores "por si acaso".